Escrito por Casa de la Memoria, delegación Ramallo, conformada por un grupo de víctimas del terrorismo de Estado, familiares de víctimas y compañeros. Quienes comenzaron a desarrollar una tarea investigativa en toda la zona que conformó el cinturón rojo de la provincia de Bs. As durante la dictadura cívico militar.

¿Cómo hacer para demostrar que aunque no vivimos esa época la sentimos nuestra?
¿Cómo transmitir ese escalofrío que se siente adentro, ese nudo que se hace en la garganta, esa impotencia que nos invade cada vez que miramos a la cara o escuchamos contar su historia a una madre o abuela, a un familiar, a un sobreviviente o a un nieto recuperado...a quien le devolvieron su identidad?

Quizás para las personas que lo vivieron, nuestros padres, abuelos, sea difícil y vean peligroso esto, el hablar, manifestarse, hacer valer nuestros derechos, el hacer justicia, o les cueste ver que seguir luchando no es vivir en el ayer, sino evitar un futuro similar, pero los jóvenes somos los herederos de todos los ideales que se gestaron durante y después de la dictadura y de las palabras JUSTICIA, DERECHOS y LIBERTAD, por eso tenemos la posibilidad de sentirnos responsables y hacerlas realidad, y esta es una forma de decir PRESENTE.
Porque el ayer marco mi pasado, me ayuda a vivir el hoy, construye mi futuro, el ayer hace que valore mas mi libertad, que la disfrute y la abarque en toda su magnitud; esa que hace 33 años atrás tanto deseaban…era solo eso, solo pedían libertad.

Los grandes cambios deben empezarse por las pequeñas actitudes personales, por defender los ideales de cada uno y transmitirlos, contagiarlos al otro. Así como lo hicieron y lo siguen haciendo las madres y abuelas de plaza de mayo, esas grandes mujeres a las que de un día para el otro les cambiaron la vida totalmente, les destruyeron a sus familias, les quitaron a sus hijos, maridos y nietos…y con ellos la felicidad; pero hay algo que no se llevaron y fue la fuerza, la voluntad, la valentía, el amor…los cuales usaron como instrumentos para la lucha contra los genocidas, y con las que cada jueves caminaron y aun hoy caminan por las veredas de esa plaza cargada de historia, sin ningún otro deseo más que JUSTICIA y LIBERTAD.

Por eso valoro enormemente el poder hoy elegir mis estudios, disfrutar de leer un buen libro, conocer los diferentes ideales políticos y con mi pensamiento crítico formar los míos, poder escribir y decir lo que pienso, expresarme y hacerlo saber, hoy si queremos…PODEMOS SER LIBRES!!
Y considero algo muy importante y esencial este espacio que se le da a la casa de la memoria. A travéz del cual es posible ESCUCHAR, OPINAR, DEBATIR, VALORAR, pero por sobre todo…RECORDAR, PARA PODER SER LIBRES Y CONSTRUIR UN MAÑANA DIFERENTE A LO QUE HICIERON CON NUESTRO AYER.

Porque somos hijos de aquel momento,
Porque somos parte de la historia,
PORQUE NO SOMOS AJENOS…LOS JOVENES NO SOMOS AJENOS!!!

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