(por Mariano Vázquez, enviado especial - ACTA). El presidente de Bolivia recibió este jueves en la ciudad sagrada de la cultura tiwanakota, a 71 kilómetros de La Paz, el mandato espiritual de todos los pueblos indígenas del mundo para conducir el nuevo Estado Plurinacional. “Los pueblos del mundo siempre de pie nunca de rodillas frente al capitalismo y esa es una lucha milenaria de nuestros antepasados”, afirmó durante su discurso en la escalinata del Templo de Kalasasaya, en un acto llamado a hacer historia.

Desde antes que saliera el sol la ciudad sagrada de Tiwanaku comenzó a poblarse. Cerca de las 11, hora establecida para la llegada del presidente Evo Morales Ayma, no menos de 30 mil personas se agolpaban en los alrededores de la mítica ciudadela andina. Miles y miles autos y colectivos se agrupaban en la zona, las familias se sentaban en ronda a comer y charlar, banderas de Bolivia y Wipalas (crespón de los pueblos originarios) se mezclaban con el azul, negro y blanca (del MAS, partido de gobierno) y las de las delegaciones internacionales presentes.

Una hora y media después -luego de una serie de ceremonias de purificación dentro del sitio sagrado- el primer mandatario apareció en la puerta del Templo de Kalasasaya ante la multitud. Estaba acompañado de una mujer aymara de 90 años y amautas. Desde su llegada estuvo protegido por dos mil comunarios, que oficiaron como la Guardía de Honor, y que estuvo integrada por los Ponchos Rojos y la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Bartolina Sisa.

Morales llevaba puesta una túnica blanca hecha con lana y cuero de llama y un sombrero de cuatro puntas, que según explicaron, simbolizan la integración de todas las regiones Bolivia. Dos niños y la anciana le hicieron entrega de los bastones de mando. De esta manera, el Jefe de Estado quedó consagrado como guía espiritual de los pueblos originarios del mundo.

Irreversible

“Este proceso es sin retorno, es irreversible, no porque así lo quiera Evo Morales o el compañero (vicepresidente) Alvaro García Linera, los pueblos han decidido dignificarse y liberarse del imperialismo norteamericano”, afirmó en unos de los tramos de su discurso. Y agregó: “Hemos cumplido el mandato de nuestro abuelo Tupac katari que en noviembre de 1781 decía, antes de su descuartizamiento, `yo muero pero volveré millones’; hermanas y hermanos ya somos millones en Bolivia, millones en el mundo”.

En otro de los tramos de su discurso llamó “a escucharnos entre nosotros”. “Si no escuchamos a la Madre Tierra, a todos los seres vivos que habitan esta Madre Tierra, si no escuchamos a nuestros padres, pero sobre todo si no escuchamos a los más humildes, a los más abandonados, jamás podremos aprender y por eso es tan importante escucharnos. El que escucha aprende, el que escucha cambia, el que escucha está preparado para servir a su pueblo”, dijo.

Vivir bien

Evo Morales clamó por un mundo sin desigualdades y que distribuya la riqueza: “El vivir bien significa vivir en armonía con todos y con todo, vivir bien implica trabajar por la igualdad, por la dignidad de todas y todos”, sostuvo. “En la vida es más importante todavía saber compartir, saber distribuir la riqueza de manera equitativa entre todos. Lo que es del pueblo, para el pueblo”.

Y ejemplificó: “En Bolivia para compartir la riqueza del pueblo nacionalizamos los recursos naturales para que los recursos económicos vuelvan a manos del pueblo boliviano. Compartir es dar y recibir. Saber compartir es dentro de una política de vivir bien”. Por eso apuntó contra el capitalismo que “trae egoismo, individualismo, sectarismo. Compartir es reconocer que todos somos hermanos, de una sola madre que es la naturaleza, que es la Pachamama, que es el planeta Tierra. Saber compartir es dejar de competir para complementarse”.

Asimismo invitó a soñar sin límites “sobre la dignidad, sobre la igualdad, sobre la libertad de nuestros pueblos; soñar para que el más abandonado también tenga esa posibilidad de acceder a la educación, a la salud, a los servicios básicos” aunque cueste todavía hacérselo entender a algunos grupos, cuesta todavía poner en práctica estos sueños, pero si todos soñamos, con seguridad, estaremos de acá a poco tiempo salvando al planeta Tierra para salvar a la humanidad”.

Evo pueblo

Morales envió también un agradecimiento especial a los movimientos sociales de Bolivia y el mundo por su solidaridad y su ayuda para derrotar a los intentos del golpe de Estado que sufrió durante varios tramos de su primer mandato. “El pueblo consolidó la democracia en Bolivia donde se gobierna subordinado a la voluntad del pueblo”, subrayó.

Justamente esa presencia internacional se hizo sentir en los cientos de movimientos sociales y originarios que participaron de esta ceremonia andina. Grupos llegados de Argentina, Venezuela, Ecuador, Perú Guatemala, Chile, Panamá y Colombia dieron cuenta no sólo de una cosmovisión particular de la vida, sino también del apoyo irrestricto al proceso de cambio que Morales inició en 2005 con aquella victoria histórica y que el 6 de diciembre pasado ratificó con el 64% de los votos.

En el ambiente sonaban los pututus (cuernos de vacuno) y bombos. Es la revancha de los silenciados, los pueblos originarios ahora tienen la oportunidad de hablar y de mostrar al mundo no sólo su devenir histórico sino también el derecho a vivir un futuro digno y justo en armonía con sus creencias.

Al igual que en la ceremonia de hace cuatro años atrás en este mismo sitio, Morales reafirmó que su segundo período se regirá bajo el mandato moral de los pueblos indígenas de su país: Ama Suha (no seas ladrón), Ama Llulla (no seas mentiroso), Ama Qhella (no seas vago). Y por eso proclamó: "Hay un Estado colonial que se va y un Estado Plurinacional que llega, un Estado colonial que permitió el saqueo de los recursos de la madre tierra, un Estado discriminador, un Estado colonial que siempre nos han visto a los pueblos indígenas como salvajes”.

La CTA

Las banderas de la Organización Barrial Tupac Amaru flameaban junto a las de Bolivia y las Wipalas. Una destacada delegación de la CTA se dio cita en esta ceremonia histórica. Hugo Yasky (secretario general), Adolfo Aguirre (Internacionales), Stella Maldonado (Formación), Milagro Sala (Acción Social), Fernando Acosta (CTA Jujuy) y Roberto Baradel (CTA Buenos Aires) fueron algunos de los dirigentes que aquí dijeron presente.

Hoy será el turno de la posesión presidencial en la flamante Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia.

En primer término se hará el juramento e imposición de la medalla “Mariscal Antonio José de Sucre” al vicepresidente Alvaro García Linera, a cargo del Presidente de la Cámara de Senadores.

Posteriormente se realizará el juramento e imposición de la “Banda Presidencial y Medalla del Libertador Simón Bolívar” a Morales Ayma de manos de García Linera. Acto seguido ambos dirigirán un mensaje a la nación.
La fiesta popular terminará a las 17 en el Estadio Hernando Siles con acto público.

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