El acatamiento a la medida tuvo una adhesión -según los gremios- superior al 90 por ciento. En este contexto, el Gobierno de la provincia oficializó la extensión del calendario escolar hasta el 19 de diciembre (originalmente estaba previsto terminar las clases el día 12 de diciembre).
De acuerdo con el relevamiento realizado por las fuerzas que integran el Frente Gremial (SUTEBA, FEB, UDA y AMET), el 95 por ciento de los trabajadores adhirió a esta jornada de lucha, que teniendo en cuenta la huelga de hoy suma 7 días sin actividad en las escuelas.
Sobre la protesta, Mirta Petrocini, presidenta de la FEB, dijo que "el acatamiento a esta nueva medida de fuerza remarca el respaldo de las bases y demuestra el malestar que existe en la docencia por la falta de una respuesta concreta por parte de la Provincia".
Es preciso recordar que el miércoles los docentes se reunieron con las autoridades provinciales en paritaria, donde el Estado presentó una contraoferta que garantizaba un haber mínimo de 1.450 pesos pero con una redistribución distinta a la planteada por los gremios. Esta contrapropuesta generó el rechazo de los sindicatos, quienes al culminar el encuentro anunciaron el paro de 48 horas por considerar que la iniciativa oficial "achataba la escala salarial".
Por su parte, el gobernador Daniel Scioli decidió avalar la extensión de las clases. El director de Escuelas, Mario Oporto confirmó también que "este mes se liquidaron los sueldos con descuentos por los tres días no trabajados en agosto". Ese punto será planteado en la Justicia, adelantaron en el Frente Gremial.
En las escuelas públicas la actividad fue casi nula. Con cadenas telefónicas, mensajes de texto y mails, la decisión del nuevo paro se extendió rápido por la Provincia. Y aunque la medida se resolvió al anochecer del miércoles, ayer los docentes la conocían.
El conflicto comenzó el 11 de agosto y la de hoy es la séptima jornada con aulas virtualmente vacías. Hasta el miércoles, la disputa parecía encaminada hacia un acuerdo. Pero las negociaciones fracasaron cuando las autoridades no oficializaron un esquema de aumento analizado por sindicalistas y técnicos de Escuelas. Ese día en la paritaria, el Gobierno propuso un mínimo de $ 1.450 y un incremento promedio del 12,4% para todo el escalafón. Para llegar a ese piso pasaban al básico (que quedaba en $ 813) $ 110 que cobraban ya como suma fija. Y sumaban $ 146 como nueva bonificación.
Los educadores argumentaron que "no inyectaba plata nueva al básico. Incorporaba dinero que ya cobraban". Y consideraron que "se burló su buena fe al aceptar una tregua de una semana para discutir".
La oferta es inaceptable
El Secretario General del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA-CTA), Roberto Barade; declaró que "el Gobierno desconoció lo que habíamos discutido el día viernes y nos hizo otra propuesta. En lo que presentó el Gobierno, ganaría más el docente que recién se inicia que el que tiene años de antigüedad”.
Por último, Baradel manifestó “Creo que intervinieron en la negociación técnicos del Ministerio de Economía que no tienen ni la menor idea cómo se compone el salario docente. Hay una contradicción dentro del mismo gobierno sobre lo que se planteó el viernes y lo que se discutió el miércoles”.
Para el secretario adjunto de la CTA bonaerense "la llave para destrabar el conflicto la tiene el Gobierno que debería concretar en los hechos la propuesta que veníamos debatiendo hasta el viernes con los funcionarios y que luego fue modificada de manera unilateral e inaceptable".