En contraposición con el discurso oficial que sostiene que todos los sectores de la economía han crecido con el actual modelo económico, los productores de manufacturas de cuero atraviesan una grave crisis que desembocó en el cierre de plantas, en la pérdida de 5.000 puestos de trabajo, y una caída de sus exportaciones del 41,5% respecto al año final de la convertibilidad.
"La raíz del problema está en que entre el 80 y el 85% de los cueros son exportados y la mayor proporción se vende en estado semiterminado para ser acabado y manufacturado en otros países", explicó el titular de la Cámara Industrial de Manufacturas del Cuero y Afines (CIMA), Raúl Zylbersztein.
En efecto, desde 2002 los cueros semiterminados aumentaron su participación en el total de exportaciones de la cadena de valor y las manufacturas en su totalidad, que en 2001 alcanzaron a u$s 265 millones, este año totalizarán apenas, u$s 155, un 41,5% menos.
Otra de las causas es la baja faena de ganado vacuno, que en 2006 fue un 12% inferior a la de 2005 -alrededor de 2 millones de cueros menos-. En tanto, las proyecciones para 2007 también son declinantes.
Aumento del cuero salado
Durante 2006 el precio promedio del cuero salado subió 55% con respecto a 2005, y casi un 40% por encima del promedio histórico, en décadas. "Los precios y la cantidad de cueros faenados denotan una crisis estructural para la cadena de valor con serias consecuencias para los industriales y trabajadores" indicó Zilbersztein y agregó que "las pérdidas no se reparten por igual entre los diferentes actores de la cadena".
Casos ilustrativos
A principios de diciembre del año pasado, la firma Antonio Espóstio S.A cerró su planta de tapicería y terminó de despedir al personal que le quedaba: 150 personas. Esto se suma al cierre de la americana Seaton (1500 puestos de trabajo) y a las drásticas reducciones de Becas y Arlei.
Otro caso es el de Magalcuer, ejemplo de industrialización en inversión productiva y creación de puestos de trabajo. Su nueva planta en el parque industrial de Pilar la inauguró - hace dos años - el Presidente Néstor Kirchner y, pese a tener el 5% del mercado de cinturones de los Estados Unidos, se vio forzada a presentar su concurso preventivo, porque la baja de rentabilidad le impide su normal desenvolvimiento.
De hecho, las que más sufren esta crisis son las pequeñas curtiembres que proveen a la industria local con calidad artesanal. Pero el caso de CIDEC con 500 personas suspendidas y también las dificultades de la quiebra de la curtiembre YOMA, que ni siquiera puede pagar el 30% de la nómina, son los indicadores incontrastables del problema, más allá de las particularidades de cada caso.
El INDEC advirtió el problema
El INDEC dio cuenta de esta situación particular cuando informó a mitad del año pasado que la cadena del cuero es el único sector industrial que, durante 2005 y el primer semestre de 2006, redujo los obreros ocupados y las horas trabajadas.
Índice de Obreros Ocupados (IOO) y de Horas Trabajadas (IHT). Variación respecto igual período del año anterior
Caída de las exportaciones con valor agregado
"Las exportaciones de toda la cadena de valor, entre cueros (en todos sus estadios), calzados, marroquinería, tapicería, ropa de cuero y otras, marcaron en 2006, el triste record de los últimos 10 años: menor valor exportado, menor participación de manufacturas y máxima participación de cueros semiterminados y wet blue", se lamentó el economista de la entidad, Esteban Ferreyra.
El fenómeno señalado por el asesor de CIMA se puede apreciar en el siguiente gráfico.
Cadena de Valor bovinos. Exportaciones Totales y Participación de Cuero Semiterminado y Manufacturas
El segmento de fundas de tapicería, según el INDEC, es el que más se ha contraído, con 200 millones de dólares de exportaciones en 2001. En 2006 no alcanzó los 40 millones de la misma moneda.
Resolución dictada por el ex ministro Lavagna
La Resolución 748/02, todavía vigente, emitida por el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, selló la suerte de estas manufacturas reduciendo sus reintegros y aumentando los del cuero semiterminado. No obstante, la otra Resolución que dictó Lavagna - 655/05 - que bajaba las retenciones al cuero crudo, fue derogada el año pasado.
"Si baja la oferta de cuero y suben las exportaciones del semiterminado, el resultado que tenemos ante nuestra vista es desindustrialización, concentración de las exportaciones, pérdida de recursos naturales, menor valor exportado y, por consiguiente, la pérdida de empleo, no sólo en el sector de manufacturas, sino en el curtidor, con caída laboral en los sectores de terminado, que son los que más puestos de trabajo ocupan, en sus respectivos procesos", aseguró Ferreyra
En 2006, los cueros faenados para ser industrializados en el mercado interno cayeron un 23%, aunque se compensó en parte por la fuerte liquidación de stocks. Para 2007 el panorama es aún más decepcionante, la disponibilidad sería más baja: 11% por debajo de 2006 y ya no quedan stocks.
"Pese a tener una materia prima de calidad internacional y escasa en el mundo, la Argentina desaprovecha este recurso para transformarlo en el exterior en manufacturas de alto valor agregado, aunque tiene en nuestro país, las empresas, la tecnología y el conocimiento, adecuado. Pudiendo ser competitivos en el mercado mundial de manufacturas; el país se va transformando en proveedor de cuero semiterminado de China", advirtió Zylbersztein.
(*) Consultora. Informe publicado en Rebanadas de la Realidada