El Sindicato de Obreros y Empleados de la Industria del Maíz (SOERM) inició a principios de agosto una serie de reclamos que incluía un aumento salarial para el sector. Reivindicaciones que fueron desestimadas por el sector empresarial.

Según la empresa refinería de maíz, con sede en la localidad de Baradero y Chacabuco, ya habían otorgado para un aumento del 16 por ciento para la categorías mas altas y un 22 por ciento para la categorías mas bajas, y que “de ninguna manera la inflación no había superado esos índices ”.

En ese contexto, la comisión directiva del SOERM, encabezada por Rafael “Quique" Molina, secretario General del Sindicato y Adjunto de la CTA provincia de Buenos Aires en conjunto con el cuerpo de delegados resolvieron realizar un paro de actividad en las plantas de Chacabuco y Baradero.

La medida forzó a las autoridades de la empresa abrir una mesa de dialogo que culmino el pasado 10 de septiembre con un aumento de 200 pesos (Septiembre, octubre y Noviembre) para todo el personal y el compromiso de reiniciar la mesa de conversaciones en diciembre para actualizar los salarios del 2008.

En ese sentido, Miguel Velásquez, dirigente gremial de la CTA-SOERM indicó que “esto demuestra que sí los empresarios tiene voluntad de mejorar los salarios pueden y están en condiciones de hacerlo”.

Asimismo, Velásquez asevero que “también refleja que la justa distribución de la riqueza que desde la CTA pregonamos no es un delirio cósmico sino una fuerte convicción de que podemos vivir dignamente todos sin necesidad de excluidos y trabajadores con magros sueldos.

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