(Por Carlos Saglul, Agencia CTA) El paro previsto para mañana en los hospitales bonaerenses fue levantado tras una reunión entre representantes del Ministerio de la Salud de la Provincia y la Asociación de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP-CTA). El secretario general de la organización, Pablo Torres explicó a ACTA la decisión de los médicos.

Según el dirigente la decisión se tomó luego de que se garantizara la estabilidad laboral de los dirigentes gremiales que habían sido cesanteados en San Miguel y San Andrés de Giles.

Torres explicó que “los compañeros fueron despedidos como represalia. Habíamos llevado adelante un conflicto gremial por el pago de sumas adeudadas que finalmente llegó a buen puerto. No obstante, como represalia los intendentes despiden a los dirigentes de la seccional”.

El referente de la CICOP señaló que de la negociación se desprende el reconocimiento de su organización como interlocutor valido del gobierno provincial, mientras por otra parte se abrió una mesa de negociación para considerar reivindicaciones importantes para el sector.

Torres señaló que “los despidos y represalias, así como el no reconocimiento de la CICOP son sucesos desgraciadamente comunes en muchos municipios de la provincia de Buenos Aires donde no existe la Constitución ni derechos laborales y gremiales”.

Ayer les dijimos a los funcionarios que “el gobierno de Scioli o garantiza como es su obligación el respeto a la Constitución y las leyes o se hace cómplice de su violación, por suerte optaron por lo primero. La organización de los trabajadores de la salud no les dio lugar para hacerse los distraídos”.

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