Los empleados vienen luchando para mantener la planta en funcionamiento, pese que muchos de ellos hace más de 5 meses que no cobran sueldo y deben soportan todo tipo de atropellos.
Alfredo Segura, secretario General de la CTA regional General Alvarado aseveró que “los empresarios comenzaron hace varios años con un plan de achique pero siempre decían que era para mejorar las condiciones de los trabajadores e impedir el cierre”. Con ese pretexto (el de impedir el cierre) fue que atrasaron los pagos de los salarios y “cuando no pudieron mentir mas iniciaron un plan de vaciamiento del frigorífico con el objetivo de abandonar todo”.
Para Segura, esa fue la gota que colmó el vaso y que motivó a los trabajadores a adueñarse del frigorífico para transformarlo en una cooperativa de trabajo o en una empresa autogestionada por sus empleados.
Los setenta trabajadores que hoy mantiene la planta tomada ya se reunieron con el intendente de ese distrito y comenzaron las negociaciones políticas a esfera provincial para darle un encuadre jurídico la nueva estructura laboral.
Por último, Segura denunció un “accionar mafioso en torno a los empresarios que bajo amenazas e intimidaciones quieren hacer fracasar las negociaciones con el municipio y la provincia de Buenos Aires y buscan amedrentar a los trabajadores para que depongan la situación.
