(Por Duilio Ferro y Yamile Socolovsky) Efectivos del destacamento policial “Las Catonas” de la localidad de Moreno atacaron en forma violenta a cuatro dirigentes del Movimiento Octubres, que integran la CTA. Los jóvenes debieron ser asistidos por el personal médico de guardia quiénes diagnosticaron politraumatismos varios y severas fracturas. Tomó intervención la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia. Mañana abra un acto en repudio en ese lugar

El Movimiento Octubres denuncio torturas, agresiones y amenazas contra cuatro militantes de esa organización -tres de los cuales pertenecen a la Juventud- por parte del personal policial del destacamento “Las Catonas” del partido bonaerense de Moreno. El vergonzante episodio ocurrió el pasado miércoles 18.

Ante la gravedad de los hechos, ya tomó intervención la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia que radicó una denuncia contra la fuerza policial ante la Procuraduría de la Corte y el Ministerio de Seguridad.

En tanto, desde el Movimiento señalaron que “estas acciones policiales ilegales son cotidianas y comunes en esa zona del conurbano bonaerense”. Y destacaron que “nuestros jóvenes están permanentemente expuestos a la violencia institucional”.

Por tal motivo, la agrupación Octubre convocó a todas organizaciones sociales a participar del acto en repudio a la represión policial e institucional que se realizará mañana, jueves 26, a las 18, en la Anfiteatro de Las Catonas (ingreso por ruta 23 y de La Cierva) de la localidad de Moreno. También invitaron a todas las organizaciones juveniles del distrito a conformar una “Coordinadora contra la represión y la tortura” en el distrito de Moreno.

La tortura es un clásico policial

Todo comenzó el miércoles 18 pasado, alrededor del mediodía, cuando Sergio Yapura (20 años), militante de la Juventud de Octubres, regresaba al comedor del barrio ubicado en la torre 711 del complejo habitacional “Las Catonas”, luego de unas compras en la verdulería para compartir el almuerzo del mediodía.

En ese momento, y encontrándose a escasos 50 metros del comedor, un móvil policial se estaciona frente a él y bajan un par de efectivos del destacamento “Las Catonas”. Uno de ellos toma su arma reglamentaria y, sin mediar orden de detención ni dar la voz de alto, abre fuego contra Sergio por la espalda. El joven -al verse agredido- corrió desesperado hacia el comedor para resguardarse de la balacera.

Los efectivos rodearon el comedor y amenazaron con "entrar y reventar todo" si el joven no se entregaba (luego se comprobaría que jamás hubo orden de detención ni orden de allanamiento). En ese contexto, y ante la amenaza de la policía de reprimir y destruir todo, decidió salir y ponerse a disposición de los uniformados. Cabe destacar que la seccional policial queda a sólo escasos 100 metros del comedor por lo que no se entiende la actitud policial de querer introducir a Sergio en el patrullero..

Así las cosas, Elba Espeche, de 62 años y referente del comedor, se ofreció a acompañar al joven hasta la comisaría para evitar males mayores. Los oficiales se negaron y empujaron a la señora mayor que cayo pesadamente al piso. Como resultado del ataque recibió contusiones varias en todo el cuerpo.

Luego, tras el forcejeo y el nerviosismo reinante, Sergio llegó a la comisaría abrazado a Paola Ortiz y Sabrina Ortiz, dos compañeras militantes sociales de la juventud local, y a Elba que logró incorporarse poco después. Pero el accionar policial ilegal no termino allí: en la puerta del destacamento intentaron detener a las chicas y a la señora por lo produjeron nuevos forcejeos.

Una vez mas Elba es derribada al piso por un golpe que un efectivo le propino con su bastón. Por lo que sufrió la fractura de uno de sus brazos. Una de las jóvenes recibió varios puntapiés en el abdomen, tórax y espalda. Mientras que Paola y Sergio fueron arrastrados hasta el interior de la dependencia policial.

Una vez dentro, Sergio fue llevado a un cuarto donde varios policías lo torturaron salvajemente y pretendieron que firmara un documento en el cual debería hacerse cargo de una serie de delitos que jamás cometió.

En tanto, sus compañeros del Movimiento se comunicaron con una abogada que de inmediato intervino y gracias a sus oficios los demorados ilegalmente fueron puestos en libertad. Mas tarde Paola denunció que fue humillada verbalmente y psicológicamente por miembros de la fuerza a causa de su color de piel y su procedencia social.

Los dirigentes lesionados fueron trasladados a la guardia del Hospital Interzonal de Moreno donde se dejó constancia de las lesiones en el cuerpo de Elba, Sergio, Paola y Sabrina. Mas tarde, un grupo de dirigentes sociales concurrió a la comisaría a radicar la denuncia. Nadie los atendió. Cabe destacar que durante toda la noche un móvil policial anduvo vigilando el comedor infantil y las viviendas de los jóvenes agredidos por la institución

A la mañana siguiente tomó intervención la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, quien de inmediato denunció el episodio ante la Procuraduría de la Corte y el Ministerio de Seguridad.

Comentar este artículo