- "hacia el paro y movilización"
Un mapa gigante de la República Argentina hacía de telón de fondo de la rueda de prensa que una treintena de dirigentes de la CTA brindó hoy a las 15 en un salón del Hotel de la Asociación de Trabajadores del Estado, en el barrio porteño de San Telmo. Sobre el Océano Atlántico se leía “4 de noviembre: Banderazo, Paro y Movilización Nacional”. 200 círculos con la bandera nacional, distribuidos en cada una de las provincias, daban noción de la magnitud de la convocatoria. La presencia de los máximos representantes de la organización gremial, revelaban el compromiso.
Actos, asambleas, acciones callejeras, paros en los distintos sectores de trabajo, banderazos y marchas serán parte de esta medida que significará millones de argentinos movilizados el 4 de noviembre en todas las ciudades del país para decir que la integración de los pueblos es posible y repudiar la presencia del presidente de los Estados Unidos, George W. Bush.
La pelea por la vida
De Gennaro fue el encargado de introducir a los periodistas presentes acerca de la III Cumbres de los Pueblos y la participación de la CTA. “Están presentes -dijo- además del secretariado nacional, los secretarios generales de la CTA de todas las provincias que dan no solamente marco a esta conferencia de prensa, sino que muestran la calidad del compromiso que asumimos en la convocatoria que hemos resuelto, que forma parte de toda la acción trascendente que llevamos adelante los últimos años en la lucha por la distribución del ingreso, la democracia y la soberanía nacional, pero que va a tener este mes de noviembre un hito fundamental ya que esta lucha no sólo se va a dar en el marco de nuestro país, sino que se va a expresar y consolidar en Latinoamérica”.
Para el secretario general de la Central se gestó a partir de diciembre de 2001 un nuevo tiempo protagonizado por el pueblo argentino, pero también por toda América Latina. Pero en paralelo “también se aceleró de manera dramática la política genocida y militar del amo del mundo, expresada en el señor Bush, presidente de los Estados Unidos”, subrayó. Y comparó: “Sin lugar a dudas, estos dos hechos están confrontados cotidianamente y marcan por un lado la profundización de reprimir las ansias de transformación de nuestros pueblos y la mejor y mayor movilización y organización de nuestros pueblos, es la pelea entre la vida y la muerte”.
Por estas razones es que destacó el hecho de que la Argentina sea parte convocante -en el marco de la Autoconvocatoria NO al ALCA- con el protagonismo de organizaciones populares de todo el continente para poner en marcha la III Cumbre de los Pueblos que se realizará en Mar del Plata del 1 al 5 de noviembre. “Para la CTA es un orgullo y una responsabilidad ser parte de esta convocatoria en el momento actual que atraviesa nuestra patria y sabemos que se juega la perspectiva de construir alternativas, no alcanza con decir lo que no queremos, sino que tenemos que construir lo que queremos: queremos construir la nueva sociedad que necesitamos consolidar acá, en América Latina y el mundo”, sostuvo y agregó en relación a la política exterior norteamericana: “Tenemos que expresar una lucha cotidiana a la política de militarización y cercenamiento de las democracias en nuestros continentes. Y declaramos: no a la pobreza, sí a la distribución de la riqueza y al trabajo; no somos deudores y sí somos acreedores de un deuda social, de una deuda ecológica, de una deuda histórica; no al ALCA y a los tratados de libre comercio que hoy intentan que sea la nueva variable de sometimiento por parte de los Estados Unidos y sí a la integración de los pueblos; no a la militarización y sí a la soberanía popular. Estas cuatro consignas es lo que da marco a que la Mesa Nacional de la CTA pueda decir que se siente parte de este conjunto de ideas de la Cumbre de los Pueblos”.
“El 4 de noviembre no sólo haremos acciones en Mar del Plata, sino en todo el país. Ya son 200 ciudades que han empezado con acciones rumbo a la Cumbre”, y citó dos ejemplos de la federalidad de esta convocatoria. “Los compañeros de La Quiaca se unirán en un abrazo simbólico con los de Villazón” en el puente internacional que une a Bolivia con la Argentina. “Y en Ushuaia las movilizaciones partirán desde la plaza Héroe de Malvinas. Apostamos y creemos en los millones de argentinos que nos vamos a movilizar ese día. La decisión que estamos tomando es parte de una tradición antiimperialista de nuestra clase pero también de nuestro pueblo”, apuntó De Gennaro.
“Diatribas de terrorismo”
En referencia a la presencia militar en la región, De Gennaro expresó: “Hoy estamos viendo como se enseñorea en el horizonte nuestro la presencia militar. Hoy en territorio paraguayo (observamos) la presencia de las fuerzas armadas de Estados Unidos que, con total impunidad, se acercan para apropiarse de uno de los mayores acuíferos del mundo, el Acuífero Guaraní; esa triple frontera (que comparten la Argentina, Paraguay y Brasil) está siendo sometida a una diatriba de terrorismo que es el que implantan estos señores avasallando cualquier tipo de democracia o participación popular”.
También dijo que estar presentes en Mar del Plata y en cada ciudad de nuestro país habla del protagonismo democrático de nuestro pueblo porque cuando se lleve a cabo la Cumbre de los Pueblos “paralelamente se realiza la Cumbre de las Américas, con todos los presidentes, menos Fidel Castro y que se hable de voltear aviones o zonas de exclusión demuestra la ilegalidad política con que se manejan los acuerdos en esos niveles, nosotros apostamos a la seguridad que da la participación y el protagonismo del pueblo”.
