La misma comenzará el 31 de agosto con columnas de manifestantes que partirán desde distintos puntos del país y culminará el día 2 de setiembre con un gran acto en a Plaza de Mayo.
Hugo Yasky, Secretario General de la CTA, sostuvo que “confrontamos con un gobierno que representa al sector que piensa que tener una Argentina con industrias es populismo. Necesitamos reconstruir la unidad del campo popular, hacer una y mil marchas, todas las acciones necesarias para que este gobierno empiece a retroceder”.
En cuanto a las acciones que se deben llevar adelante contra las políticas neoliberales del gobierno sostuvo que “hay que reconstruir espacios de articulación para que las luchas no queden aisladas”. Además, manifestó que “la convocatoria a la Marcha Federal no es excluyente de la convocatoria a un paro nacional”.
En tanto Daniel Pérez Guillén, Secretario Adjunto de la CTA, también se refirió a las causas que llevaron a la organización de la marcha e hizo hincapié en “el brutal ajuste que se viene dando que significa una pérdida salarial muy fuerte, en los niveles de desocupación y un tarifazo irracional que afecta a los sectores más vulnerables”.
Finalmente el Secretario General de CTA provincia de Buenos Aires, Roberto Baradel, expresó que la Marcha Federal es “una convocatoria no sólo de resistencia sino de construcción” y concluyo: "Una marcha federal porque creemos que tenemos que manifestar nuestro rechazo a las políticas de ajuste que está aplicando el gobierno. Tiene que haber una manifestación y una movilización de diferentes sectores del país que se están viendo afectados con respecto a despidos, a los tarifazos".
