Marchamos para denunciar que ante el hambre, la desocupación, los aumentos indiscriminados en tarifas y alimentos, el crecimiento de la pobreza, el sector financiero es el único beneficiado de este modelo económico impulsado por el Gobierno Nacional que solo produce enormes ganancias al sector parasitario de la economía en detrimento de la clase trabajadora, con el agravante de fugar las divisas de nuestro país.
Con enorme participación de les militantes de la Central de Trabajadores, la columna de organizaciones se concentró en el Obelisco, marchó por Corrientes y culminó con una ceremonia en la esquina de la Parroquia de la Merced (donde se guardan las banderas conquistadas al enemigo por Belgrano) en la que se mostraban "crucificados" el trabajo, la educación y la salud.
Se remarcó que no es posible un modelo que da enormes ganancias a un puñado de banqueros con la timba financiera, a costa del hambre de millones, de quitarnos los remedios de nuestros mayores, las necesidades de nuestras familias y, hasta la posibilidad, de comprar los cuadernos a nuestros hijos cuando empiezan la escuela.
Reafirmamos el compromiso de resistir esa políticas en la calle y con unidad. Finalizando el acto compartiendo el pan "para que no falte más nada a los sectores populares"
