Desde la UTPyA y el SI.TRA.PE (Sindicato de Trabajadores del Pescado y Afines) nos solidarizamos con la triste situación que está atravesando el sector de las lanchitas amarillas del puerto de Mar del Plata.

No podemos comprender como de alguna manera toda la población de esta ciudad no se siente identificada con la lamentable situación que padecen nuestros compañeros trabajadores de la pesca del sector costero, puesto que este fue el que dio inicio de la industria pesquera, ellos fueron los precursores de ella, y tienen ya muchísima cantidad de años en la actividad tantos como la industria misma, son los que primero trajeron materia prima para que se elabore y se desarrolle en lo que hoy se convirtió. Además, tienen una profunda historia en nuestro mar, tienen sus muertos, una trayectoria marcada por acontecimientos muy fuertes. Son el emblema de mar del plata, la postal que todo turista quiere tener cuando se vuelve a su lugar de residencia, representa el trabajo en el mar, el puerto de Mar del Plata, el turismo. Han tenido que enfrentar el inmenso mar en las condiciones más difíciles, con elementos rudimentarios, sin tecnología, han tenido que levantar sus redes a mano, en fin es una actividad forjada a base de esfuerzo con trabajadores que han dejado la vida en las lanchas amarillas.

Creemos que los estamos dejando olvidados, sin buscar algún tipo de solución. Esta bien el desarrollo industrial y el avance pero no se debe olvidar el origen, mirar al futuro pero no darle la espalda al pasado, a las raíces. Forman parte de nuestra cultura.
Seria muy triste que la pesca costera llegue a ser solo un recuerdo, que ya no haya trabajadores de esta índole, y se dejen pudrir las embarcaciones y su madera sea un elemento para hacer fuego.

La prosperidad, el progreso de la industria esta muy bien, pero no a costa de actuar en forma individual, pisoteando nuestra cultura, nuestras raíces, nuestros viejos, las cosas que nos impulsaron hasta aquí y hacia el futuro. Los marplatenses debemos tomar consciencia de lo que nos pasa.

Nosotros mostramos nuestra solidaridad y nos ponemos a disposición de las lanchas amarillas, diciéndole a todos los sectores involucrados o no, a toda la sociedad que sienta el afecto y la admiración hacia los trabajadores de las lanchas amarillas y lo que ellas representan, que busquemos la manera de encontrar una solución para ellos. La flota amarilla no es la responsable de la depredación y de los estragos que se han realizado en nuestro mar. Es una flota desconcentrada, que trabajan codo a codo y cada patrón esta arriba de su embarcación, no son empresarios que están detrás del escritorio. Si se desarticula este sector se favorece a los grupos concentrados para monopolizar la comercialización de los productos pesqueros. Favorecer al poder concentrado es destruir a los más chicos para favorecer a los grandes.

Desde nuestro sector, los trabajadores de tierra, no debemos olvidar que el sindicato de origen que nos representó en el comienzo tiene la matricula desde el año 1942, y los trabajadores de esa época manufacturaban la zafra de los pescado que traían las lanchas, debemos estar agradecidos y aun hoy el sector de la anchita entre otros sigue dependiendo de esta pesca, también nuestras compañer@s se ven afectadas y están bastante olvidadas.

Sentimos un gran respeto por este sector, creemos que tendría que sentirlo toda la ciudad de Mar del Plata, como así mismo debiera suceder con todo el país si tomara este conflicto la trascendencia debida.

Repetimos estamos a total disposición de los compañeros del sector de pesca costera, a los trabajadores de las lanchas amarillas nuestra total solidaridad.

ROBERTO VILLAOLA
Secretario General del SITRAPE y presidente de UTPyA (FETIA-CTA)
Celular: 223 4469923