Los trabajadores de Kromberg&Schubert denuncian las prácticas antisindicales de la empresa y la connivencia del sindicato que los debiera representar. Ambas organizaciones, la empresarial y la gremial actúan coordinadamente a través de esta sociedad antisindical donde las escenas de violencia verbal y amenazas contra la integridad de los trabajadores se ha vuelto habitual

La semana pasada la representación del plástico comunicó en asamblea una suspensión de un día por “falta de producción”, los trabajadores aceptaron la propuesta, aunque luego en los días previos debieron realizar la producción equivalente al día de suspensión, ese mismo día operarios con antecedentes de activismo recibieron telegramas de despidos.Todas estas maniobras ilegales se dan con la intención de evitar el proceso de organización que llevan a cabo sus trabajadores y que sus despidos antisindicales no logran socavar. Ajeno a las preocupaciones de los trabajadores, el representante gremial del plástico se ocupó de aclarar que ellos “quieren que se vaya Cristina Kirchner, y que venga (Sergio) Massa, es cierto, en los 90’ nos equivocamos al apoyar a Carlos Menem pero con Sergio (Massa) va a ser distinto" para luego advertirles "y qué quieren chicos, que vengan los mazos (autopartes) de Brasil de nuevo como en enero”. Por aquellos días de enero, 54 trabajadores fueron despedidos y otro tanto fueron suspendidos 8 días por una supuesta baja en la producción automotriz. Sin embargo, para los trabajadores esto no fue así: “Lo que realmente pasó fue que en lugar de producir los mazos nosotros, nos pusieron a adaptar los mazos que trajeron desde la planta de Brasil, les cambiamos las guías de goma, retocamos los fuelles, le hicimos encintado completo para que no se vean los cables sueltos, le pusimos la etiqueta "Hecho en Argentina" y se lo mandamos a Volkswagen” esa fue la crisis de producción que permitió a Kromberg efectuar suspensiones, cuyos criterios de selección fue encomendado al cuerpo de delegados de la planta, que responde al oficialismo que responde al gremio del plástico y que representa a los operarios autopartistas de Kromberg, por lo que afirman que “Este sindicato no nos representa, Pitrola tampoco”.

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