No sólo proporcionó una supuesta justificación religiosa a los asesinos, sino que fue un represor más.
Será juzgado por 42 privaciones ilegales de la libertad, torturas y 7 homicidios.
Von Wernich nació en 1938, en San Isidro y se ordenó sacerdote en 1976, a los 38 años. Había transitado por varios seminarios y más de un obispo se había negado a ordenarlo. El hombre decía a sus amigos que había optado por ser cura porque es una profesión en la cual se trabaja los domingos y se descansa el resto de la semana.
Fue arrestado por primera vez en agosto de 2003, después de declarar en el Juicio por la Verdad que lleva adelante la Cámara Federal de La Plata.
Ese primer arresto ordenado por Schiffrin y Julio Reboredo, fue provisorio. El juez Arnaldo Corazza lo dejó en libertad para reclamar su detención un mes y medio después. Sólo que Von Wernich ya no estaba en el domicilio que había informado; estuvo prófugo durante una semana, hasta que decidió entregarse.
Cuando fue interrogado por el juez, reconoció haber visitado los campos de concentración de Camps (los llamó "cárceles") pero negó haber visto a presos con signos de haber sido torturados. Se amparó en el secreto confesional para evitar dar precisiones.
Todos los centros clandestinos que visitó funcionaron en dependencias oficiales: en la Brigada de La Plata; la comisaría 5ª de La Plata; Puesto Vasco, en la subcomisaría de Don Bosco, Quilmes; y Pozo de Quilmes, en la Brigada de esa ciudad.
(Fragmento del tríptico elaborado y firmado por CTA Provincia de Buenos Aires y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos La Plata. Se puede bajar en esta misma sección).
