Pascual Arce, militante de la Juventud de la CTA de Avellaneda, fue asesinado el 24 de febrero de 2007 en el humilde barrio 7 de Enero cuando se disponía a asistir a un cumpleaños. "Demostró siempre ser un compañero incondicional, de esos que dejan su huella en lo mas profundo del alma de quienes lo acompañan", lo recordaron su pares de la Juventud.
Arce, llevaba varios años militando en la Central y participó en el 2000 en el nacimiento de la Juventud. Estuvo también en la coordinación de emprendimientos productivos, copas de leche; además, "se daba tiempo para cuidar a su madre, a su familia y a sus sobrinos, a quienes llevaba a la escuela y a jugar", subrayaron sus compañeros.
Según recuerdan sus compañeros de militancia "hace un año dos pibes le dispararon por la espalda, en uno de esos absurdos hechos de violencia de los que somos víctimas en los barrios donde no hay futuro para muchos y el presente sigue siendo de hambre, miseria y frustraciones. Su crimen fue perpetrado en la esquina de su casa, frente a algunos amigos de Pascual, y los autores fueron vecinos del barrio".
