Ambas se inscriben en un fuerte shock ortodoxo de carácter neoliberal que busca replantear la relación capital-trabajo en términos regresivos para los sectores populares y en favor de los sectores oligopólicos del capital. Implican un ajuste económico ortodoxo que afecta fuertemente el poder adquisitivo de los salarios y el nivel de empleo.
Así también el DNU y la Ley Ómnibus vulneran derechos constitucionales y laborales. Estas iniciativas politicas fueron rechazadas por nuestra Central CTA-T y es convocante junto con CGT, CTA-A, UTEP y otras organizaciones al paro nacional del 24/1/24.