Asimismo, reivindicamos la fuerte intervención de la CTA Regional Patagones encabezada por su Secretario General, Nicolás Garcia. Esta acción posibilitó el diálogo entre el Municipio y las familias afectadas. Este es un paso más hacia el ejercicio efectivo del derecho a la vivienda y la puesta en práctica de la Ley 14.449 de Acceso Justo al Hábitat.
El acercamiento entre municipio y familias desalojadas beneficia a los habitantes de Patagones con necesidades de tierras.
Valoramos la apertura del diálogo que se inició en la reunión el último viernes entre el ejecutivo municipal y las familias desalojadas de la toma hace una semana, con presencia de la CTA Patagones a pedido de las familias. El intendente Curetti informó sobre los avances para la urbanización del Aeródromo del que saldrían entre 800 y 900 lotes que constituirían un alivio para cubrir las necesidades habitacionales.
Las familias consideran positiva esta alternativa. Se acordó también realizar un relevamiento de todas las personas con necesidades de vivienda. Se planteó como problema a resolver la brecha entre los tiempos administrativos para la urbanización y las urgencias de mucha gente. Hubo compromiso del gobierno en avanzar en este problema.
Desde la CTA Patagones resaltamos el hecho de que se hayan encontrado canales de diálogo apostando a una gestión conjunta. Consideramos también que el desenlace que tuvo esta intensa semana no solo es un avance para las familias desalojadas sino para todas las personas de la ciudad con necesidades reales de vivienda. Hay un dato que respalda esta mirada: la localidad contará en poco tiempo con un importante banco de tierras destinado íntegramente a lotes sociales. Por delante esta el desafío de incidir para que se aceleren los tiempos administrativos. Además, los distintos sectores debemos realizar nuestro aporte para que esas tierras se urbanicen, se entreguen y se utilicen con criterios claros merced al trabajo articulado entre el estado y la comunidad participando activamente.
La toma de tierras y la injustificada represión policial vivida estas semanas, así como lo vivido en noviembre de 2013 (con familias que recibieron los créditos PROCREAR y no pudieron comprar tierras porque les duplicaron los precios en pocos días) son las consecuencias de un mismo problema: el dominio de la producción de suelo urbano con fines de mercado. Un dato en la provincia de Buenos Aires deja al desnudo la situación: en 2013 había 950.000 familias con necesidades habitacionales coexistiendo con 800.000 viviendas vacías.
Para evitar este contrasentido escandaloso, existe la ley provincial 14449 de Acceso Justo al Hábitat. Su plena aplicación en los territorios permitiría regular el mercado del suelo y contar con herramientas para ofrecer soluciones habitacionales a todos.
Es un buen momento para que haya propuestas. La que la CTA desde 2012 para el problema del hábitat es que se aplique en el distrito la ley provincial 14449. Seguiremos avanzando en este sentido.
