La provincia de Buenos Aires se encuentra en una situación fiscal muy delicada ya que al histórico rezago que presenta en la coparticipación federal de impuestos (muy inferior a cualquier indicador social o de contribución económica que realiza), se suma a la drástica reducción de las transferencias que realiza la Nación. Este cuadro se ve agravado por el impacto negativo del mega ajuste que lleva adelante el gobierno de Milei sobre el nivel de actividad y, consecuentemente, sobre los recursos tributarios provinciales.

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