Hugo Yasky y Pablo Carro expresaron a la Central durante el debate por el impuesto a las ganancias.

Hugo Yasky – Diputado Nacional y Secretario General de la CTA

Gracias Presidente.

Creo que estamos a poco de poder votar y aprobar esta ley que en primer lugar la quiero reivindicar como un acto de justicia. Un pequeño acto de justicia. No es la ley que le va a cambiar la vida a los trabajadores, no vamos a hacer festejos como despectivamente decía alguna diputada. Sabemos que estamos en una situación difícil, pero también sabemos que este proyecto, del compañero Sergio Massa, que fue apoyado por todas las centrales sindicales. Que tuvo el aporte de la Comisión de Trabajo en pleno. Que tuvo el aporte de más de 70 gremios tanto de la CGT como de la CTA que fueron construyendo esto que hoy vamos a votar y que va a significar resarcir a un sector muy importante de nuestra sociedad de una situación absolutamente injusta.

Rodolfo Walsh decía que para los sectores dominantes había una pretensión y es que para la clase obrera la historia empezara siempre de cero. Que no tuviéramos historia. Que no tuviéramos la posibilidad de mirar para atrás. Porque cuando uno mira para atrás entiende los problemas del presente y sobre todo entiende cómo superar los desafíos del futuro. De manera que vamos a transgredir, por supuesto, esa imposición de los sectores dominantes.

Hay que hablar de lo que pasó durante los cuatro años en los que, escuché tantas ideas de los diputados y de las diputadas de la oposición, tantas críticas, tantas miradas lúcidas sobre el tema Impuesto a las Ganancias, que tendré que llegar a la conclusión de que en 4 años no hicieron nada para tratar de evitar que un millón y pico de trabajadores tuvieran que tributar todavía, sumándose a los que ya lo pagaban, porque tenían tantas ideas y tan buenas que no sabían por dónde empezar. No tenían idea.

Y la verdad es que eso no fue lo que pasó. Lo que pasó fue que le bajaron los impuestos a los sectores del poder económico. Aquí ya se dijo. A las cerealeras, a los que especulan financieramente, como ustedes dicen, a los dueños de la gallina de los huevos de oro. El problema con la gallina de los huevos de oro en la Argentina, es que pone los huevos en los paraísos fiscales. Y que cuando un huevo queda en la Argentina, en vez de oro declaran que es de latón. Por eso nosotros necesitamos empezar a discutir ley por ley la forma de avanzar hacia un país que sea más justo y sobre todo que recupere una noción que quisieron enterrar para siempre que es la de la movilidad social ascendente, que es la de que se puede progresar trabajando con las manos, con la cabeza, con el cuerpo. La idea de que no se puede construir un país que viva solo del monetarismo y de la especulación financiera.

Esa frase despectiva que hoy le escuché a un diputado: “Cuando el gobierno les tira una galletita”. Nosotros no vamos atrás de una galletita, ni formamos parte de una fuerza que quiere instalar esa práctica que toma a los trabajadores como si fueran los animalitos que están en la jaula del circo.

Nosotros queremos construir dignidad, queremos construir justicia social, queremos construir una tierra en la que el que trabaja pueda mirar a los ojos de sus hijos y mostrarles que de esa manera se vive dignamente. Queremos volver a la educación pública; queremos volver a la idea de que no es más vivo el que mete la plata en un paraíso fiscal que el que invierte como lo hacen los pymes. Queremos un país con trabajo. Y eso no se va a construir con una sola ley. No va a haber una ley mágica que de un día para el otro nos deposite en ese otro país. Son pequeños avances frente a los cuales hay que enfrentar grandes resistencias y vencerlas. Fue un pequeño avance la ley que votamos para que hubiera un aporte solidario extraordinario. Fue un pequeño avance el teletrabajo, fue un pequeño avance poder votar esta ley. Y de esa manera vamos a ir abriendo un camino que cuando nos lleve a discutir una reforma integral como todos queremos, va a ser una reforma integral en el sentido de restituir el principio de que el que más tiene más paga y con esta ley damos un pasito, no solamente para devolverle a 1.200.000 trabajadores y 100.000 jubilados más, una parte de lo que le habían quitado mal. Damos un pasito hacia esa reforma que acá dicen todos querer. Vamos a ver si cuando decimos reforma tributaria integral estamos hablando de lo mismo.

Por último, alguien despectivamente decía, tres, cuatro mil pesos, seis mil pesos, van a recuperar. Y claro, quizás lo dicen pensando en los dólares que tienen, quizás lo dicen pensando en lo que gastan en una cena cuando salen a pasear, quizás lo dicen pensando en eso.

Para un trabajador tres mil, cuatro mil, cinco mil, seis mil pesos es un dinero importante y saber que va a recibir un retroactivo desde enero a la fecha es también un dinero importante.

Por eso reivindico como trabajador esta construcción, esta ley, este Frente, este gobierno que con todos problemas que tienen que enfrentar no deja de tener en la brújula la necesidad de restituir la justicia social que es la razón de ser de nuestro Frente de Todos.

Pablo Carro – Diputado Nacional y Secretario General de la CTA Córdoba

Gracias, Señor Presidente.

Si hay un tema que los trabajadores tenemos discutido es el de Impuesto a las Ganancias. En mi caso, que provengo del sector de los docentes universitario, no fue un tema para nosotros sino hasta bien entrado el gobierno de Cristina, porque la verdad que los salarios de los docentes universitarios estaban tan deprimidos que ninguno pagaba Impuesto a las Ganancias.

Todos los sectores del movimiento obrero tenemos proyectos y propuestas para modificar el Impuesto a las Ganancias. Pero hay un punto en el que coincidimos todos los actores del movimiento obrero. Y es que el sector de los trabajadores es el sector que más aportes impositivos hacen en este país. Es decir, este país se sostiene gracias al aporte de los impuestos que hacen la mayoría de los trabajadores. Sin embargo, este fue un tema que nos dividió en el 2013 y esa división generó el caldo de cultivo, las condiciones subjetivas para que pudiera venir un candidato de la derecha a proponer en campaña esto que sigue acá: “En mi gobierno los trabajadores no van a pagar Impuesto a las Ganancias. Ese es mi compromiso” (Macri en campaña 2015).
Y la verdad es que muchísimos trabajadores se lo creyeron. Y pienso, qué feo es la mentira política, porque si hay algo que degrada la democracia es la mentira política, pero sobre todo si esa mentira se basa en el incumplimiento del contrato electoral peor aún, porque se degrada la democracia, y ya sabemos que cuando se degrada la democracia los que pierden son los trabajadores.
¿Cuál fue el resultado? Más trabajadores pasaron a pagar el Impuesto a las Ganancias.

Nosotros podríamos sacar la conclusión acá que al final da lo mismo, todo es igual, porque pasa un gobierno, pasa otro y siempre pagamos el Impuesto a las Ganancias. Pero la verdad es que hay que ponerlo en contexto al Impuesto a las Ganancias, sobre todo porque no hay que pensarlo en relación a nuestros ingresos, sino en relación a nuestra capacidad de pago. Qué es lo que podemos hacer con el salario que ganamos.

Entonces pienso mientras gobernaban Néstor y Cristina, nuestros salarios crecían. Cuando gobernó Macri perdimos un 20% de nuestro ingreso salarial.
Cuando gobernaban Néstor y Cristina las tarifas eran baratas. Con Macri tuvimos tarifazos. Mil, mil quinientos por ciento.
Con Néstor y Cristina había control de cambio y se valorizaba el peso. Con Macri devaluación, inflación descontrolada.
Con Néstor y Cristina teníamos créditos baratos que nos permitieron a los trabajadores comprar autos y comprar casas. Con Macri tuvimos los créditos UVA. No sé si lo tienen claro, atados a la inflación. Ahí están, sin poder pagar, con muchísimos problemas.
Durante el gobierno de Néstor y Cristina, los jubilados tenían los medicamentos gratuitos. Con Macri liberación de precios, apertura de importaciones, bicicleta financiera, deuda externa. Es muy distinto pagar Impuesto a las Ganancias en un contexto que pagarlo en el otro.

Por eso creo que no se trata de pagar o no pagar Impuesto a las Ganancias, sino que se trata de cuánto afecta a la capacidad de pago que tenemos los trabajadores. Y este tema no debió habernos dividido, pero lo cierto es que con el gobierno de Macri nos recordaron la importancia que tenía que el movimiento obrero estuviera unido.

Este proyecto, probablemente no sea el proyecto que hubiéramos querido impulsar desde el movimiento obrero. Porque hubiéramos querido un proyecto que cambiara de raíz este impuesto. Cambiarle el nombre, cambiar el piso, cambiar las escalas. Qué ingresos no debieran tributar. Qué gastos debieran poder deducirse, que paguen los jueces. Sin embargo el proyecto que presentó el Presidente de nuestra Cámara, Sergio Massa es un proyecto inteligente, oportuno, muy importante. Propone una modificación muy específica. Aliviar la situación de los trabajadores que están en la base de la pirámide de los que pagan el Impuesto a las Ganancias y que al mismo tiempo ese ahorro no va a ser un ahorro justamente, sino se va a volcar al consumo y va a servir a la reactivación económica.
Y esto me permite decir esto y concluyo que, por supuesto, esta propuesta, todo el arco sindical lo apoya porque entendemos que en estos temas tenemos que estar unidos, pero también porque muestra la importancia que tienen los trabajadores y las trabajadoras para nuestro gobierno. Porque somos los que generamos riqueza en este país. Porque somos los que sostenemos económicamente a esta sociedad a partir de nuestros impuestos. Porque como consumidores todos los pesos que ganamos los gastamos en el mercado argentino y porque, sobre todas las cosas si a los trabajadores nos va bien le va bien a la Argentina.