La Central de los Trabajadores Argentinos de la provincia de Buenos Aires (CTA-de los Trabajadores) participó junto a una multitud de manifestantes que se pronunciaron a favor de un poder judicial democrático, independiente, plural, amplio, accesible, con paridad de género y diversidad.

La columna de la CTA-de Los Trabajadores estuvo encabezada por Roberto Baradel, secretario General de la CTA-T bonaerense; Hugo Yasky, diputado nacional y Secretario general de la CTA-T nacional, María Reigada, Senadora provincial y secretaria de Derechos Humanos CTA-T bonaerense; Estela Díaz, ministra de Mujeres y Políticas de Género de la provincia de Buenos Aires; Daniel Catalano, secretario general de la CTA-T de la ciudad de Buenos Aires y la flamante conducción de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB) representada por su nuevo secretario general Hugo Russo.

En ese contexto, Yasky señaló a la prensa que “estamos acá con una presencia multitudinaria, trabajadores y trabajadoras de distintas organizaciones sindicales que formamos parte de un reclamo unánime que es tener una justicia independiente, democrática, que no responda a los intereses de los sectores dominantes”. Además se exigió, a su vez, el fin del lawfare y la reforma del Poder Judicial”.

Por otra parte, Baradel señaló que “lamentablemente hay un sector del Poder Judicial corrompido que responde a las corporaciones económicas y políticas y no imparte justicia”.

“Queremos un Poder Judicial que no arme causas, que no le garantice la impunidad a nadie, que termine con el lawfare, que sea realmente independiente y que atienda las necesidades de justicia de todos y todas”. Y agregó: “es indignante que tengamos a Milagros Sala presa ilegalmente y hace dos años que esta Corte tiene la posibilidad de resolver su situación y concederle la libertad y no lo hace”.

Por tal motivo, el secretario general de la CTA-T bonaerense indicó que “es muy importante que la ciudadanía y las diferentes organizaciones sociales, políticas y gremiales se expresen y se movilicen ya que es la única posibilidad de generar conciencia y que esto se transforme para bien de nuestro Pueblo y de nuestra Patria”.

Miles y miles exigiendo una justicia democrática

Con el correr de las horas el acto fue tomando temperatura y la plaza se fue colmando de manifestantes y activistas. En ese contexto, las actrices Cristina Banegas y Luisa Kuliok, leyeron el documento consensuado por todas las organizaciones sociales, sindicales y políticas que convocaron a la marcha.

El texto leído hizo referencia a la responsabilidad de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) frente a la persecución, atropello y hostigamiento a los trabajadores y el avasallamiento de sus derechos. “Esta Corte es responsable, por acción o por omisión, de la salvaje persecución sindical que se vivió a través de intervenciones ilegales a los sindicatos, armado de causas a dirigentes gremiales, persecución a jueces del fuero laboral, denigración a abogados defensores de derechos humanos, con los que convalidó y aseguró ese avasallamiento de derechos”
El documento, también denuncia: “Al igual que en la dictadura más sangrienta de nuestro país el enemigo interno fueron los sindicatos y los trabajadores y trabajadoras, del mismo modo al amparo de este sistema de justicia existió la ‘Gestapo antisindical’. Esas mesas judiciales que funcionaron a nivel nacional y provinciales tuvieron por objetivo el plan macabro de encarcelar a dirigentes sindicales sin un debido proceso y con un sistema de justicia cómplice”.

Además añade que “de igual modo, la estigmatización de la justicia del trabajo presentada como contraria al progreso nacional, la demonización de sindicatos y sus dirigentes gremiales como delincuentes, el señalamiento de abogados laboralistas como una organización mafiosa, gozaron del silencio cómplice de este tribunal, sellado con sus sentencias regresivas y antisindicales”.

Pero sin duda lo más fuerte del documento es cuando todas las organizaciones sociales, sindicales y política exigen que “ésta Corte Suprema se tiene que ir porque persigue y hostiga a sus trabajadores y trabajadoras y a sus representantes gremiales armándoles causas, planificando los juicios laborales para que demoren años emulando a las pretensiones patronales de los sectores neoliberales. Esta Corte se tiene que ir porque conoció perfectamente y permitió la sistemática persecución que diseñaron los servicios de inteligencia y el gobierno macrista para perseguir y encarcelar trabajadores y trabajadoras”.

“Pero el sesgo anti obrero de esta Corte se refleja no sólo en sus sentencias, que recortan derechos laborales con reconocimiento constitucional. El mismo comportamiento de sus integrantes denota innumerables constancias de ese desprecio al trabajador y trabajadora, a la simple ciudadanía” se denuncia en el documento.

Se tiene que ir la Corte que integran Rosatti, Rosenkrantz, Maqueda y Lorenzetti, porque desde hace más de dos años tiene cajoneada la causa que podría resolver en favor de la libertad de Milagro Sala, que lleva más de 6 años detenida y de sus compañeros y compañeras de Tupac Amaru, presos y presas ilegal y arbitrariamente por imposición de los poderes fácticos", señala en otro tramo el extenso texto.