La Juventud CTA Buenos Aires acompañó a los querellantes Sabrina Gullino, nieta recuperada y a su hermano Sebastián Alvarez en el inicio del juicio oral y público de la causa conocida como Hospital Militar,
lugar de Paraná, provincia de Entre Ríos, donde funcionó una maternidad clandestina durante la última dictadura cívico - militar.

" Desde que se inició esta causa en 2005, gracias a la iniciativa, la militancia y el compromiso con los derechos humanos del querido compañero que ya no está con nosotros, Guillermo “Mencho” Germano, Director del Registro Unico de la Verdad de Entre Ríos, no hemos parado de cosechar excelentes frutos. El mejor de ellos, sin dudas, es haber
encontrado a nuestra hermana Sabrina Gullino Valenzuela Negro, en diciembre de 2008. La alegría más grande. Y desde que está con nosotros no hemos parado de llenarla de abrazos. Todos los que no pudimos darle antes. Pero todavía nos falta su hermano mellizo.
En el Hospital Militar de Paraná nacieron ambos en 1978. A Sabrina la encontramos. Y aún buscamos sin descanso al mellizo varón. Este juicio también es la posibilidad de encontrarlo. Y llenarlo de los abrazos que nos debemos, cuando esté de vuelta con nosotros", señalaron los compañeros de H.I.J.O.S Regional Parána, que nos recibieron a la Juve CTA Buenos Aires en las puertas del Juzgado Federal el miércoles 24 de agosto bien temprano cuando comenzamos a convocarnos para señalizar que allí ese día comenzaba a juzgarse a genocidas.
Los genocidas que van al banquillo en este juicio histórico por delitos de lesa humanidad son seis: Pascual Oscar Guerrieri, Jorge Alberto Fariña, Juan Daniel Amelong, Marino Héctor González, Walter Salvador Pagano, Juan Antonio Zaccaría. Todos están acusados de la sustracción de menores y la sustitución de su identidad.

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