En la sede local de SUTEBA San Nicolás, la CTA desarrolló un debate abierto en torno a una nueva ley que autorice la interrupción voluntaria del embarazo y promueva acciones tendientes a prevenir y evitar embarazos no deseados. La actividad estuvo a cargo de Estela Díaz, secretaria de Género de CTA Nación y coordinadora del Centro de Estudios «Mujer y Trabajo», quien recordó que el tema merece “un debate que todavía está pendiente en el Congreso de la Nación”.
“Queremos empezar a dar el debate sobre derecho sexual y reproductivo para todos”, comentó en rueda de prensa Beatriz Moisés, secretaria adjunta de CTA y secretaria de Derechos Humanos de SUTEBA, quien además señaló que la actividad se desarrolló en el marco de las actividades conmemorativas del Día Internacional de la Mujer. A su vez anunció que durante el 2012 continuarán realizando talleres y actividades y entre los temas que se abordarán será la educación sexual integral, a fin de que el tema se instale en las esuelas, para acompañar la ley con “con el compromiso y la acción concreta en las prácticas en las prácticas cotidianas del aprendizaje”.
La charla-debate incluyó (como disparador para el debate posterior) la proyección de material audiovisual centrado en el balance de experiencias desarrollados en otros países de Latinoamérica, como Brasil, Chile y Méjico, centradas en el debate del aborto y los derechos sexuales.
Por su parte, Díaz explicó que “la idea es compartir la historia de la creación de la campaña por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito”, y que “además de abordar cuál es la propuesta en relación al proyecto de ley para la interrupción voluntaria del embarazo y cuál es su estado actual en el Congreso de la Nación, también queremos plantear cuáles son los ejes fundamentales por los cuales intentamos promover la sanción de esta ley”.
En este sentido, opinó que “la legislación actual sobre el aborto, que lo criminaliza con la excepción de contadas excepciones, hasta acá no ha demostrado más que su absoluta ineficacia: es una que, desde el punto de vista del código Penal, no se aplica porque no hay condenas por aborto, y tampoco disuade a las mujeres a la hora de encontrarse frente al dilema de un embarazo no deseado”.
También subrayó que la ley actual supone “una enorme injusticia social” y enfatizó acerca de la necesidad de debatir la nueva ley en estos días en que “el país está planteando una agenda de inclusión social, económica, educativa y sanitaria”.
Díaz indicó que “hace ya diez años que en nuestro país no se reducen los índices de mortalidad materna” y aseveró que “un tercio de esas muertes de mujeres son por estos abortos inducidos que se hacen en estas condiciones de desigualdad”.
A favor y en contra
La Secretaria de Género de CTA Nación también se refirió a los actores a favor y en contra del proyecto de ley que legitima la interrupción voluntaria del embarazo. “Creo que socialmente hay un apoyo muy fuerte al debate. Ha quedado demostrado fehacientemente en las últimas encuestas de opinión que se han hecho. La campaña por el derecho al aborto nació en 2005, ya llevamos casi 7 años de campaña. Si repasamos los sondeos de aquel momento y los cotejamos con los más actuales, vemos que hoy estamos por encima de un 60 por ciento de la población que está de acuerdo con despenalizar y legalizar el aborto”, comentó Díaz.
Y completó: “Por supuesto que también hay sectores que están claramente en contra. En particular, las iglesias. No todas, pero sí la posición de la jerarquía de la Iglesia Católica es una posición contraria muy activa y militante. Lo mismo que algunas de las iglesias evangélicas; pero también es cierto que no hay una posición única: hay sectores de la Iglesia Católica que se han manifestado por el derecho a decidir. Las teologías más modernas tienen otra posición, lo mismo que los judíos, los luteranos, los metodistas, que contemplan la aceptación del aborto hasta determinado período de aceptación. También están en contra algunos de los sectores más conservadores en política. En Argentina pasa esto: los sectores que son liberales en lo económico, son conservadores desde el punto de los temas sociales y hacen alianzas con sectores de la Iglesia, para manifestar posiciones rígidas en materia de moral sexual”.
Por lo demás, Díaz destacó que el proyecto de ley incluye la disponibilidad de herramientas tendientes a prevenir los casos de embarazos no deseados. Una de esas herramientas, es la educación sexual integral en las escuelas.
En este sentido, y como referente de CTA y SUTEBA en San Nicolás, Moisés reconoció que el Ministerio de Educación de la Nación ya estableció contenidos curriculares en materia de educación sexual, pero observó: “Todavía nos falta dar mucho debate con los compañeros docentes e instalar el tema dentro de las escuelas, la familia y la comunidad. Están las leyes, pero eso debe estar acompañado de compromiso y acciones concretas en las prácticas cotidianas del aprendizaje”.-
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